
Luego de eternos minutos de música, nos convertimos en polvo de estrellas que guardan en su esencia los deseos más románticos que pueden ocultarse dentro del vacío de la antología de las decisiones erróneas.
Tomo café; ese café prometedor de ilusiones alejadas de la realidad utópica de la cabeza urbana; ese café tan negro como el infierno; ese café tan fuerte y desgarrante como la muerte; ese café tan tierno y dulce como el amor; ese café que quema mi lengua y enciende mi boca; esa boca que saborea el café, comienza a balbucear historias que quieren escapar de la realidad, historias que se hacen humo de tabaco para nuestros pulmones; humo misericordioso para vosotros. Ese hedor que deja la historia, aquella hermosa historia pestilente de amor, indiscutible, romántica y polémicamente humana; ese es el deseo del polvo de la segunda estrella a la derecha.
Pero si, que rayos, la historia esta en tus polvorientos dedos, en tus manos y, por sobretodo, en tu cabeza más que en tu corazón, esa cosa es un músculo que bombea sangre y le debes la vida, pero tu cerebro maneja más que tu vida, está encima de tus decisiones y tu corazón no es nada sin el cerebro. Pero claro, viven de mutualismo. Pero el cerebro es superior, vive más, te hace existir más. Pero el corazón, te hace vivir. Claro, todo por acción cerebral. Por eso, la decisión está tan correcta, pasaste por todos los callejones del corazones y por todos los rincones cerebrales existentes y valgan a existir alguna vez. Por eso te da miedo comenzar, porque sabes cada una de las consecuencias que deberás afrontar por tus actos, sea el que sea el acto, porque ya agostaste las posibilidades de la realidad que deberás vivir. Sea la que sea tu decisión, la que mantienes o la que quisieras tener, sabes que va a pasar y estás en el plano de que no quieres salir de la estabilidad emocional parcial en la que estás, estás en el plano de que puedes reconciliarte con el amor, pero saldrás peor si es que sales, y ya no quieres más. La decisión es tuya, y saldrás perdiendo sea la que sea. En su defecto, quizás, salgas ganando. Nadie lo sabe, si no pruebas este significado abstracto que le estás dando a la misericordia.
El amor es peligroso y extingue a los humanos para convertirlos en bestias, esa es la verdad. Pero vuelven a su esencia de humanos cuando vuelve a reencantarse con la vida, el amor, la gente y consigo mismo. Vuelven al valor de ser humanidad cobarde y valiente espontaneamente, vuelven a vivir con sentimientos, sufriendo y llorando de felicidad, riendo de amargura y vengando la tristeza. Vuelven a vivir a su manera tan humana que tienen. Vuelven a nacer llenos de misericordia esparcida por la moral social y menos éticos que antes, pero mucho más conscientes. Sienten el peligro del amor y el placer de enamorarse como niños; simplemente quieren.
El trasfondo de una palabra que se enmarca en el favoritismo personal que desata un deseo oculto que tiende a la rutina y fracaso amoroso, pero ese gusto corporal, espiritual y sexual del amor. El amor en todas sus facetas, el amor tan misericordioso como siempre, siempre tan infinito y puro. El amor en la faceta más humana que se puede sentir. Misericordia es lo que le falta al amor, querer con su placer y su café.
El polvo de la segunda estrella a la derecha se echó a volar por los suspiros de la enamorada sentada al lado, sus polvos llenos de deseos. Los suspiros que eran la forma de hablar de amor era la única forma de que aquellos polvos con ocultas aspiraciones pudieran cumplir sus sueños. El sueño sin cumplir: tú. El amor perdido y el encanto reconfortado, nuevamente. Mi amor perdido, mi encanto reconfortado y mis suspiros de fuego que tienen tatuado tu nombre.-
"La enamorada de los suspiros de fuego, sentada bebiendo café junto a sus polvos de estrellas. De la segunda estrella a la derecha. Enamorada de su decisión. Historia de la misericordia. Relatos abstractos de los significados.-"
Pero si, que rayos, la historia esta en tus polvorientos dedos, en tus manos y, por sobretodo, en tu cabeza más que en tu corazón, esa cosa es un músculo que bombea sangre y le debes la vida, pero tu cerebro maneja más que tu vida, está encima de tus decisiones y tu corazón no es nada sin el cerebro. Pero claro, viven de mutualismo. Pero el cerebro es superior, vive más, te hace existir más. Pero el corazón, te hace vivir. Claro, todo por acción cerebral. Por eso, la decisión está tan correcta, pasaste por todos los callejones del corazones y por todos los rincones cerebrales existentes y valgan a existir alguna vez. Por eso te da miedo comenzar, porque sabes cada una de las consecuencias que deberás afrontar por tus actos, sea el que sea el acto, porque ya agostaste las posibilidades de la realidad que deberás vivir. Sea la que sea tu decisión, la que mantienes o la que quisieras tener, sabes que va a pasar y estás en el plano de que no quieres salir de la estabilidad emocional parcial en la que estás, estás en el plano de que puedes reconciliarte con el amor, pero saldrás peor si es que sales, y ya no quieres más. La decisión es tuya, y saldrás perdiendo sea la que sea. En su defecto, quizás, salgas ganando. Nadie lo sabe, si no pruebas este significado abstracto que le estás dando a la misericordia.
El amor es peligroso y extingue a los humanos para convertirlos en bestias, esa es la verdad. Pero vuelven a su esencia de humanos cuando vuelve a reencantarse con la vida, el amor, la gente y consigo mismo. Vuelven al valor de ser humanidad cobarde y valiente espontaneamente, vuelven a vivir con sentimientos, sufriendo y llorando de felicidad, riendo de amargura y vengando la tristeza. Vuelven a vivir a su manera tan humana que tienen. Vuelven a nacer llenos de misericordia esparcida por la moral social y menos éticos que antes, pero mucho más conscientes. Sienten el peligro del amor y el placer de enamorarse como niños; simplemente quieren.
El trasfondo de una palabra que se enmarca en el favoritismo personal que desata un deseo oculto que tiende a la rutina y fracaso amoroso, pero ese gusto corporal, espiritual y sexual del amor. El amor en todas sus facetas, el amor tan misericordioso como siempre, siempre tan infinito y puro. El amor en la faceta más humana que se puede sentir. Misericordia es lo que le falta al amor, querer con su placer y su café.
El polvo de la segunda estrella a la derecha se echó a volar por los suspiros de la enamorada sentada al lado, sus polvos llenos de deseos. Los suspiros que eran la forma de hablar de amor era la única forma de que aquellos polvos con ocultas aspiraciones pudieran cumplir sus sueños. El sueño sin cumplir: tú. El amor perdido y el encanto reconfortado, nuevamente. Mi amor perdido, mi encanto reconfortado y mis suspiros de fuego que tienen tatuado tu nombre.-
"La enamorada de los suspiros de fuego, sentada bebiendo café junto a sus polvos de estrellas. De la segunda estrella a la derecha. Enamorada de su decisión. Historia de la misericordia. Relatos abstractos de los significados.-"
"Cause my heart breaks a little
when I hear your name."
Bruno Mars.-