donde unos ojos turbios de dolor y que cuelgan penurias cotidianas anhelan el favor que les puede hacer el sueño al quedarse y dar besos que formen un pasado y no saber futuros errantes.
En esta noche, tenemos variedad de silencios para que vea usted.
Damas y caballeros, niños y niñas, ancianos, ancianas, todo el mundo, interrumpa ahora mi vida y caminemos juntos con la puerta abierta para recorrer el mundo tomado de su mano.
Todos callaron.-
Damas y caballeros, niños y niñas, ancianos, ancianas, todo el mundo, interrumpa ahora mi vida y caminemos juntos con la puerta abierta para recorrer el mundo tomado de su mano.
Todos callaron.-