Pages

viernes, 30 de marzo de 2012

Sentencia maternal.


"Corrí a dónde mamá llorando desconsoladamente por la ilusoria idea de que ya no había nada de que preocuparme, ni nada que me doliera. Ese quiebre entre la felicidad y la realidad explotaba después de muchos meses soportando la cruda idiotez de la humanidad que tendía a matar cada una de esas esperanzas renovadas que tenía para volver y retomar ese puente entre la realidad y mi desastre mundanal por vida que llevaba, el amor. Corrí por un abrazo, corrí en busca del único amor que sé que nunca me fallará, el de mamá."