
"¿Por qué me tuve que enamorar de ti?"
"No estás enamorado, solo te gusto."
"Ponle el nombre que quieras."
"¿Qué te gusta de mi?"
"Es una muy larga lista."
"Tengo muchas horas de noche aún."
"Por donde comienzo... ¿Física o..."
"Todo."
"Ok. Eres inteligente, créelo. Tus argumentos son meras falacias porque armas esa falacia, el argumento para ti es obvio, la falacia no. Tus ideas son tan circenses y con esa cuota de realidad que parece magia, dentro de la utopía, claro.Tan lógica no eres, pero con un sentido propio de la nada. Amo tu manera de expresarte sobretodo cuando hablas en voz alta, ese leve tiritón en tu voz. Tus gestos, ese lenguaje corporal tan abundante que solo pocos conocen, pocos: yo. Esa manera tan sutil de decir las cosas, cariño mío: esa prepotencia. Esa personalidad exagerada de expresarte, ese autoestima que finge ser tan, tan inefable cuando en realidad es un rechazo a todo lo que te dice: no. Ese capricho tuyo tan infantil, que se esmera en conseguir todo y a todo el que quiera. Esa maña de niña pequeña que tanto amo..."
"No soy mañosa..."
"Tu tolerancia tan escasa. Eres regalona, amo cuando te acurrucabas en mi pecho."
"Si yo soy un amor."
"Eres un amor. Me encantan tus ojos, esos labios con ese rojo pálido, tu perfil... Tu cara para mí es perfecta, son las facciones más bellas que he visto, precisas y claro con esa leve imperfección, que la hace aun más bella."
"Ok, calla..."
"Te quiero, maldita tonta."
"Yo también te quiero."
"Pero no de la manera que me gustaría que me quisieras."
"La vida no es justa, Sir Benjamon. Usted lo sabe mejor que nadie."
"Tu lo sabes mejor que nadie."
"Thomás te mataría."
"No hubiera pasado si estuviera vivo."
"¿No?
"No, es una lógica simple. Te dejaré, un piano con muchos profesores me esperan."
"Algún día me explicarás eso."
"¿Mis clases? Encantado."