-¿Por qué has vuelto?-
-Porque te amo y quiero estar contigo todo lo que sea posible. Siempre te querré. Pero descuida, soy lo suficientemente inteligente como para saber que no me tengo que enamorar de ti; es solo un amor que nunca estás dentro, por eso nunca pierdes. Es como algo así, la respuesta correcta es la respuesta incorrecta.-
-¿Te gusto el anillo?-
-Sí, era de zinc. Lo quería cambiar para pagar unas deudas, pero no aceptaron el zinc. Es un anillo de un cuento de hadas moderno.-
-Sí, el único fallo es que es imposible.-
-¿Y eso? -
-Que todo es una farsa. El anillo fue una broma.-
-Es falso, sí. Todos sabían. Pero se sintió real, tal vez porque se volvió real.-
-Estoy contento de haberte conocido.-
-Yo también estoy contenta.-
-¿Por qué? Te fuiste, porque quise que te fueras.-
-Sí, lo sé. Estoy contenta de haberme conocido. Encontré a alguien a quien amar, que por cierto, eres tú. Pero me amo más a mí.-
-¿Estoy aburriéndote?-
-Desafortunadamente, sí. Lo siento.-