
Trato de dormir y estas ahí.
Trato de huir y te apareces frente a mí.
Trato de decir adiós y de nuevo… ¡Ahí!
¿Qué pasa? ¿Me has atado de piernas y manos
Que al tratar de huir me quedo quieta?
Y por mas que me esfuerzo, he caído y vuelvo a caer
Y esa mirada... ¡no me intimida!
Entiéndelo.
Basta de falsas esperanzas; dime las cosas como son
De ti, jamás me podré librar…Y lo único que quiero es...
Desatar estas malditas amarras… Y escapar de aquí...
Te has ganado mi odio.