
Las consecuencias de las diversas entidades que puedan pasar no son mas que las casualidades que inventa el destino y que nosotros estamos obligados a creer, ya que es la vida que nos ha tocado vivir… todos hemos odiado la vida que llevamos, en algún momento de nuestro laberinto; perfecto, que convivamos con ella, no implica quererla, ni amarla ¿Quién no ha odiado su vida? ¿Quién no se ha preguntado, alguna vez, para que esta viviendo? ¿Quién no ha tenido un pensamiento suicida? ¿Quién no se ha intimidado por la muerte? Son interrogantes que se responden fácilmente, sin embargo, no falta el estúpido que puede responder con otra pregunta, educación vete al infierno, estupidez al limite… indigente cerebro, y mas de un billón de neuronas desperdiciadas… Mísera vida… ¿Qué más puedo pedir de una sociedad, donde el ser considerado el más inteligente de un grupo, cree que la vida es justa y que la inteligencia no es más que un par de libros, profesores, cuadernos en manos, apuntes en diversas hojas, un par de buenas calificaciones durante el año y un vocabulario amplio… Donde el ser mas inteligente es el que escribe con un léxico avanzado, pero aun así no aplica al hablar… El humano que dice ser inteligente porque en su libreta se señala la nota más alta en la escala? Que abatida es la vida en la que me encuentro… que melancólico, aunque existen 3 cosas que hacen que pueda ser feliz y tener día a día, o mas bien, la mayoría de los días, esta sonrisa perfecta y sutil en la cara, uno: yo; dos: la vida; y tres: tú.